La vida es muy corta para desperdiciar el tiempo

10/11/10

Papi ¿cuanto ganas?

-Papi, ¿cuánto ganas por hora? 
Con voz tímida y ojos de admiración, un pequeño recibía así a su padre al término del trabajo. El padre dirigió un gesto severo al niño y repuso:
- Mira hijo, esos informes ni tu madre los conoce. No me molestes que estoy cansado.
- Pero papi, -insistía- dime por favor ¿cuánto ganas por hora?
La reacción del padre fue menos severa. Sólo contestó:
- 15Bs. por hora.
- Papi, ¿me podrías prestar 10 Bs? - preguntó el pequeño.
El padre montó en cólera y tratando con brusquedad al niño le dijo:
-  Así que, esa era la razón de saber lo que gano. Vete a dormir y no me molestes, muchacho aprovechado.
Había caído la noche. El padre había meditado sobre lo sucedido y se sentía culpable. Tal vez su hijo quería comprar algo. En fin, descargando su conciencia dolida, se asomó al cuarto  de su hijo. Con voz baja le preguntó al pequeño:
- ¿Duermes hijo?
- Dime, papi - respondió entre sueños.
- Perdóname por haberte tratado con tan poca paciencia; aquí tienes el dinero que me pediste, - respondió el padre.
- Gracias papi - contestó el pequeño y metiendo sus manitas debajo de la almohada, sacó unas monedas.
- Ahora ya completé. Tengo 15Bs. ¿Me podrías vender una hora de tu tiempo?preguntó el niño...

No hay comentarios: